¿Por qué es tan importante el rol de la mujer indígena? En la cosmovisión amazónica, la complementariedad organiza el mundo y el bienestar solo se logra desde el pensamiento y el trabajo, tanto femenino como masculino. Para los pueblos indígenas, la vida no es posible sin la existencia del hombre y la mujer, ya que juntos reúnen lo necesario para evitar la enfermedad, para traer el alimento abundante y para cumplir con el calendario ecológico y agrícola, de acuerdo a las épocas dadas desde el origen.
El rol de las mujeres fue asignado desde que el mundo les fue entregado por sus ancestros. Éste no solo tiene que ver con ser dadoras de vida y responsables de la crianza de personas buenas, o como ellas lo llaman, personas verdaderas, también implica ser madres de semilla, es decir, poseedoras de las semillas de sus grupos étnicos, para intercambiarlas y heredarlas de suegras a nueras o de madres a hijas.
Por eso, y con la intención de abrir espacios para participar, poner sobre la mesa sus necesidades y formas de entender lo político desde las realidades de las mujeres, se reunieron en Trinidad del Tiquié lideresas, representantes comunitarias y coordinadoras locales de cinco AATIS: ACIYA (Asociación de Autoridades Indígenas de Yaigojé Apaporis) y ACIYAVA (Asociación de Autoridades Indígenas Yaigojé Apaporis Vaupés), ACIMA (Asociación de Capitanes Indígenas del Mirití Amazonas), ACAIPI (Asociación de Capitanes y Autoridades Tradicionales Indígenas del río Pirá Paraná ), ACURIS (Asociación de comunidades Unidas del río Isana Surubí) y AATIZOT (Asociación de Autoridades Tradicionales Indígenas de la Zona del Tiquié).
Durante una semana, este encuentro promovió el pensamiento y reconocimiento de las mujeres en torno a temas como la representación, la participación y la integralidad. El objetivo era identificar cuáles espacios y acciones cotidianas hacían parte de su accionar político como indígenas en el territorio.
La primera de las respuestas fue la chagra como lugar político de enunciación y construcción de un poder basado en la producción de alimento. También mencionaron la economía para el bienestar o economía solidaria, como la posibilidad de tener alternativas productivas que sean sostenibles y favorezcan al gobierno propio y beneficien al territorio: “Para mí, ser una mujer indígena es tener autonomía, fortalecer la cultura, la chagra y estar en armonía con el territorio y la familia”, dice Yaneth, mujer maloquera, “nosotras estamos intercambiando experiencias, demostrando el conocimiento de mujeres indígenas, ya que cada etnia tiene una forma de vivir, de preparar la comida. Es por eso, que al intercambiar, podemos llevar conocimientos nuevos a nuestro territorio; por ejemplo, temas de plantas medicinales y semillas”.
Construir una mirada y proyección que reúna los objetivos comunes de las mujeres que cohabitan el macro territorio fue uno de los objetivos del encuentro. Sentarse juntas y reunirse a pensar en qué las une y las fortalece, potencializa sus acciones cotidianas, que, por el hecho de ser cotidianas, pasan desapercibidas en los espacios de construcción política. A través de las conversaciones, discusiones y reflexiones, las mujeres formularon unos principios comunes para la construcción de una estrategia de fortalecimiento de la gobernanza de las mujeres y del fortalecimiento dentro de sus organizaciones.
Las Mujeres indígenas amazónicas aportan desde el conocimiento femenino al manejo del territorio, a la transmisión de la cultura y el conocimiento a las nuevas generaciones, al tiempo que cuidan del bienestar de todos a través de la comida cultivada en la chagra. Es por esta razón que la defensa del territorio y el fortalecimiento del gobierno propio debe incluir el rol de las mujeres y la contribución que ellas pueden dar.