La cartografía social ha sido un instrumento muy importante, ya que es un medio para la identificación cultural y tradicional del paisaje, de los recursos de la selva y del río, además de ser una herramienta de gestión del territorio ante las entidades gubernamentales.
En la Amazonía Colombiana, los pueblos indígenas reconocen sus territorios ancestrales a través de historias que son transmitidas oralmente por los sabedores tradicionales a las generaciones más jóvenes, lo que permite conservar el conocimiento cultural y ancestral de estos pueblos.
De este proceso de transmisión colectiva de saberes, resultan diferentes dibujos en mapas de papel que dan cuenta de los aspectos más importantes de su cultura como el territorio, los recorridos por donde sus ancestros buscaron un lugar para asentarse y vivir, los lugares de origen de las semillas, los sitios sagrados y los lugares de caza, cultivo y pesca. Gracias a la cartografía, los pueblos indígenas reconocen su territorio y la profunda conexión que existe entre ellos, la selva y todos los seres tangibles y espirituales que habitan allí .
La Fundación Gaia Amazonas desde sus inicios y como parte de su metodología, incorporó la cartografía social dentro de los procesos que, por más de 30 años de trabajo, lleva con las comunidades indígenas de la Amazonía colombiana. Es el caso de las comunidades de ACIYA en Yaigojé Apaporis, hicieron uso de la cartografía social para construir las bases del Régimen Especial de Manejo (REM).
Los mapas hechos por las comunidades indígenas son un medio para identificar amenazas, resolver conflictos en temas como el uso de la tierra, la delimitación de la jurisdicción comunitaria, el uso y manejo de los sitios sagrados y de los lugares de caza y pesca. También representan una oportunidad de reflexión y participación comunitaria donde todos aportan e intercambian conocimientos y experiencias.
Adicionalmente, la información que las comunidades indígenas recogen a través del ejercicio de cartografía social ha permitido hacer un diagnóstico sobre el estado actual del territorio y de los retos que se presentan de cara al futuro, de esta manera, pueden contribuir de manera activa a la solución de problemas ambientales, mitigar posibles presiones y amenazas sobre el territorio y dar un buen uso de los recursos que la selva les ofrece.
Toda la información que los indígenas recogen, sistematizan y analizan durante los ejercicios de cartografía social y de investigación local son de su propiedad, y se convierte en herramientas para la toma de decisiones sobre su territorio y su cultura. Desde Gaia Amazonas, acompañamos y facilitamos los procesos a través de nuestros asesores y asesoras en género, medio ambiente, gobierno propio, cultura e información geográfica.
El equipo de Sistemas de Información Geográfica de Gaia Amazonas, realiza la a sistematización de la información através de la digitalización de los mapas de con ayuda de puntos GPS, imágenes de satélite, modelos digítales del terreno e información cartográfica geo-referenciada de diferentes fuentes. En este proceso hemos trabajado con ACURIS, ACAIPI, ACIYA, ACIMA y AATIZOT, para generar mapas y herramientas que aporten a la conservación de sus tradiciones y cultura ancestral.
Entre los resultados de la cartografía social está la revitalización de la memoria colectiva y la apropiación de los conocimientos ancestrales por las nuevas generaciones, la coordinación entre sabedores y curadores del mundo para la realización de rituales y curaciones siguiendo los ritmos y pautas establecidos en los calendarios cosmológicos culturales, y la celebración de propuestas de manejo de acuerdo con la normatividad ancestral para el uso y protección de los lugares sagrados.
Contar con diversos mapas como fuente de documentación del territorio tradicional ha servido para posibilitar el diálogo entre pueblos indígenas del país interesados en mantener y fortalecer sus saberes culturales relacionados con el ordenamiento territorial.